Cuántas veces habremos escuchado la leyenda de Sant Jordi. Una bonita historia de sacrificio, valentía y amor, con final feliz.
Pero es que, la leyenda no deja de ser una historia mágica que nos engalana una festividad muy arraigada, sobretodo en Cataluña, pero que viene de muchos años atrás.
Os queremos contar algunas anécdotas, más allá de la leyenda tan conocida por todos nosotros.
- Sant Jordi se celebra el 23 de abril en honor al caballero Jordi que murió en el año 303. El caballero nacido en Capadocia (Turquía), estaba a las órdenes de Diocleciano y se negó a seguir la orden de perseguir a los cristianos, por lo que fue torturado y condenado a muerte.
- Esta es la base real de la historia de Sant Jordi, pero lo cierto es que, con el paso de los años, la veneración por su figura y su difusión por Europa, han dado lugar a numerosos detalles fantásticos, como la leyenda.
- Se sabe que en el siglo XV ya se celebraba una feria de rosas en el Palacio de la Generalitat de Barcelona durante este día, a la que acudían sobre todo las parejas de novios y esposos. Por eso, todo apunta a que la costumbre de regalar una rosa en Sant Jordi viene de esta feria.
- En el lenguaje de las flores, la rosa es símbolo de feminidad y el rojo de la pasión. Por eso, la rosa de Sant Jordi mezcla ambos elementos. Siendo actualmente la auténtica protagonista de la festividad.
- Aunque la costumbre de regalar una rosa ya empezó a fraguarse en el siglo XV, la del libro todavía tardaría bastante en llegar. Su origen se remonta a la década de los 20 del siglo XX, cuando el escritor valenciano Vicente Clavel y Andrés, propuso hacer una fiesta para promover la venta de libros en Cataluña. La fecha que se eligió en ese momento fue el 7 de octubre de 1927.
- Dos años más tarde, mientras se celebraba la Exposición Internacional de Barcelona, los libreros de la capital salieron a la calle y la iniciativa tuvo tanto éxito que decidieron cambiar la fecha al 23 de abril, coincidiendo también con la muerte de Miguel de Cervantes y de William Shakespeare.
Comentarios recientes